Publicaciones

20 diciembre, 2018

/

proyectopascaorg

¡GRACIAS TOTALES!

41844783_2014321201990316_7248973706867769344_o

Hace tres años nos embarcamos en un viaje ambicioso que pretendía reconocer la pluralidad de voces que componen la sociedad civil latinoamericana en un mecanismo de diálogo, articulación y acción colectiva de actores que tuvieran interés en retomar los espacios institucionales que la OEA tiene abiertos para la consulta y participación de la sociedad civil, en especial en lo que respecta a la creación de agendas de incidencia de cara a la Cumbre de las Américas del 2018 y al seguimiento de las responsabilidades adquiridas por los gobiernos de la región en la Cumbre anterior, celebrada en Panamá en el 2015.

El viaje era hacia la participación incidente de la sociedad civil, y el vehículo era el proyecto Pasca (Participación de la Sociedad Civil en la Cumbre de las Américas).

Siendo REDLAD una red de organizaciones y actores sociales presente en la región hace 10 años, nos enfrentábamos al reto de que el mecanismo estuviera compuesto única o mayoritariamente por el grupo de actores que hacen parte de la historia de la Red, lo cual le hubiera quitado legitimidad y fuerza a su acción. Para evitar esto, tocamos la puerta de viejos actores cercanos y amigos, pero también de otras organizaciones que no conocíamos, pero nos fueron referidas. Con la capacidad de mirar más allá de nosotros mismos, logramos armar un grupo sólido y diverso que, a través de casi 300 actividades, lograron crear espacios nacionales de diálogo que luego dieron pie a la creación de una agenda de sociedad civil y 15 reportes independientes de seguimiento de compromisos asumidos por los gobiernos en la Cumbre del 2015.

Cerca de 200 grupos y organizaciones de 14 países construyeron lo que decidieron llamar el Foro Ciudadano de las Américas, que con la coordinación técnica de RED, ha empezado a posicionarse como un lugar de diálogo, una plataforma de incidencia y una correa de transmisión de la ciudadanía latinoamericana en la turbulenta vida política regional sentada en la OEA y otros escenarios multilaterales.

Además de las cifras y resultados que encontrarán en el presente informe, hay varios éxitos que quisiera compartir:

Por primera vez en la historia de las Cumbres de las Américas, la sociedad civil y grupos sociales participaron activamente en los diversos escenarios políticos que componen el proceso de Cumbres. La presencia de actores locales y regionales en las diferentes reuniones del GRIC preparatorias de la Cumbre, y la presencia de una vocera de sociedad civil en la plenaria presidencial de la Cumbre, demuestra que cuando hay voluntad política cualquier cosa es posible en términos de abrir la puerta a la participación. Que sea este el momento para extender un agradecimiento público al Ex Embajador Antonio García Revilla quien desde Cancillería peruana hizo que esto fuera posible.

Además, otros actores, incluyendo a la OEA, demostraron estar abiertos a la innovación para abrir la puerta a la participación, escuchando a los representantes de gobiernos amigos y construyendo espacios de construcción colectiva con amplia participación. En efecto, pensar espacios de participación es un proceso más rico y exitoso si se hace con participación abierta y plural. También en esto hay que agradecer al gobierno mexicano, el ex Embajador Luis Alfonso de Alba y Luz Helena Baños, así como otros funcionarios que desde la Cancillería y la Misión ante la OEA abrieron el espacio para la creación participativa del mecanismo de participación en Coaliciones. Así mismo, un agradecimiento a nombre de cientos de organizaciones y actores sociales que han encontrado en Catherine Pognat, de la Oficina de Relacionamiento con Sociedad Civil de la OEA, una escudera de nuestras causas.

Pero, además, en la misma sociedad civil encontramos apertura a nuevas voces, la coalición que articula a actores progresistas del mundo religioso de la región y a actores de los colectivos LGBTI regionales, son una buena muestra de ello.

Este ha sido un viaje en el cual hemos querido innovar en aproximaciones al diálogo regional, en metodologías de consulta y participación, en actores involucrados y su relacionamiento. El proceso ha sido tremendamente enriquecedor, y de un gran fortalecimiento institucional para REDLAD.

Agradecemos a todas las personas que desde sus organizaciones dedicaron horas a labrar el camino y pilotear la nave, y a todas las demás que decidieron confiar en el proceso y participar en él. Ahora empezamos una nueva etapa en el camino, de cara a la Cumbre del 2021 y a la visibilización de las voces de la ciudadanía latinoamericana, al fortalecimiento de sus organizaciones y grupos sociales. A pesar del recorrido ganado en términos de consulta y participación, falta mucho para llegar a la incidencia, esa es nuestra meta.

¡FELIZ NAVIDAD!

¡FELIZ AÑO NUEVO 2019!